Disculpad este post, pero me tego que descargar.
El día de hoy ya no iba bien. Bastante curro por la mañana, con unos números que no cuadraban, y curso por la tarde. Que sí, que en principio es más distraído, pero en realidad ha sido un desastre. Teníamos que crear una sociedad en SAP, un ejercicio simple, sobretodo porque era con datos inventados, nada serio, a modo de prueba, pero como estábamos doce personas haciendo lo mismo, nos bloqueabamos entre nosotros y nos hemos pasado la tarde esperando a unos y otros (y había un par por allí con un poco más de pavo de la cuenta). Total que a ratos charlaba con unas compañeras de mi proyecto anterior que también estaban en el curso, a ratos iba haciendo trabajo para adelantar... Espero que mañana y la semana que viene el curso sea más provechoso.
En estas que la gente plega, que ya es la hora, y yo vuelvo a mi puesto de trabajo para acabar de cuadrar lo que no he podido por la mañana. En lo que parece un pispas lo consigo. Miro el reloj, las nueve menos veinte. Plego. Llego al autobús justito, justito pa que se me escape en los morros, digo. Toca esperar, unos veinte minutos. Y yo que ya venía de buena hostia... Total, que espero al siguiente, que no me gusta nada porque lleva una ruta distinta, que dá más vuelta para llegar al mismo sitio y que además no acaba trayecto en mi parada, sino que sigue, con el peligro que eso lleva si te duermes... como me ha pasado a mi. Es decir, que me he acabado bajando del autobús tres paradas tarde, así que paseito (en la imagen, la marca roja es la parada y la marca verde es mi casa). La vena hinchada de la frente se me debía ver de lejos.
Hastiado, sudando y harto de la bolsita del tupperware (aquí iba a poner "de los cojones", pero al final no) y del coñazo del portátil, me pego el paseo. Casi llegando, me acuerdo del bar que hay al lado de casa donde el sábado vi el Real Sociedad - Barça con un colega. Se está jugando la vuelta de semifinales de Copa del Rey, la vuelta del partido del gol de Messi. Miro el reloj, deben quedar veinte minutos. Entro. Quien me mandaba a mi, tal como iba la jornada...
Miro el marcador y van 2-0. Pienso "joder, que mal pinta", pero pido una cerveza. La camarera me la pone delante y marca el Getafe, 3-0, todo a la vez. Si llego a entrar dos minutos más tarde en el bar ni me siento. Le pego un trago. 4-0. Me la acabo a Sant Hilari, como en los comités, y me largo.
Kiku, si me estás leyendo, creo que al final no me apetece ir a Madrid para San Juan. Ya si eso otro año, eh?
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2 comentarios:
que dia tan horrible tío... lo del Barça no tiene nombre, estaba tan trankilamente en mi cuarto pongo la radio y van 2-0, pero a los 5 minutos marca el getafe, yo no podía creerlo, pero es que al cabo de 5 minutos más vuelve a marcar y digo, venga, a la puta calle que bajón.
Fatal de los fatales. Necesitando marcar dos goles, chutaron dos veces en veinte minutos. Pero se ve que antes no habían chutado ni una sola vez.
Sabes una cosa? El lema de mi empresa define muy bien lo que pasó anoche... Sabes a qué me refiero?
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